martes, 14 de junio de 2011

LA NOCHE DE SAN JUAN


FESTEJO NOCHE DE SAN JUANSan Lucas narra en su Evangelio, que María, en los días siguientes a la Anunciación, fue a visitar a su prima Isabel cuando ésta se hallaba en el sexto mes de embarazo. Por lo tanto, fue fácil fijar la solemnidad del Bautista en el octavo mes de las candelas de junio, seis meses antes del nacimiento de Cristo. Desde entonces se señaló esta noche como la de San Juan, muy próxima al solsticio de verano que ha heredado una serie de prácticas, ritos, tradiciones y costumbres cuyos orígenes son inmemoriales en toda Europa y se han extendido por muchos pueblos de América. Lo paradójico del asunto es que el 24 de junio se celebra la fecha del nacimiento de San Juan el Bautista, que en realidad no debería festejarse porque el dies natalis de los santos siempre fue el de la muerte.
En el Evangelio de San Lucas se cuenta que su padre, el sacerdote Zacarías, había perdido la voz por dudar de que su mujer, Isabel, estuviera en cinta. Sin embargo en el momento de nacer San Juan la recuperó milagrosamente, como se lo había predicho el ángel Gabriel.

La celebración de la noche de San Juan tiene un origen tan lejano como incierto. Éste es el tópico que siempre se suele decir cuando se habla de ella. Lo cierto es que cada uno la celebra a su manera y todas ellas son válidas. Desde quienes van a la playa a cumplir con un ritual ya establecido para sanar los males que no receta el SAS a quienes salen al campo en busca de determinada hierba que posee poderes sobrenaturales, pasando por quienes se lavan la cara de tal o cual manera o, simplemente, quienes disfrutan de la noche más corta del año. Este hecho es, precisamente, el que da fuerza al día de hoy, porque se convierte en el preámbulo del verano como una llamada a la diversión que caracteriza este tiempo. Por este motivo fueron frecuentes en Córdoba las verbenas en esta noche, que poblaban de cordobeses la alameda existente entre la Cruz del Rastro y la ermita de los Mártires, para que luego digan que siempre hemos vivido de espaldas al río. Lo que nunca he entendido es porqué el día de San Juan era la fecha en que finalizaban los contratos de alquiler. Hasta tiempos no muy lejanos, en las calles de la ciudad se colgaban por estas fechas trapos blancos en las ventanas de las viviendas que iban a quedar desocupadas el 24 de junio. Cuentan que en este día la ciudad vivía un incesante trajín de carros en los que la gente trasladaba los cuatro enseres que constituían todas sus posesiones. Ahora, los camiones de mudanzas, no dan abasto con los trastos.
En la noche de San Juan se vuelve a empezar; es una noche de cambios. El agua y el fuego son los elementos que ayudan a poner en orden nuestras vidas. El agua purifica y el fuego sirve para quemar todo lo antiguo y poder comenzar con la nueva etapa.
El ambiente de las playas es inmejorable © Michelle Chaplow
El ambiente de las playas es inmejorable
A pesar de que el solsticio de verano del hemisferio norte es el 21 de junio, la noche del 23 se festeja como la más corta del año, en la que según la mitología ocurren sucesos extraños y algunos dioses paganos se hacen visibles.
Existen muchas tradiciones y actos que se pueden o deben hacer durante esta noche tan especial. Dicen que si saltas tres veces sobre una hoguera, te limpias y purificas y tus problemas desaparecen. También es común mojarse los pies en el agua a media noche, con el fin de hacer desaparecer los malos espíritus.
Otra costumbre es lavarse los pies y la cara tres veces para que se cumplan tres deseos y tener felicidad durante los siguientes doce meses. Los deseos también se pueden escribir en una hoja de papel que se quema en la hoguera, aunque en algunos sitios lo que se escribe son los problemas o lo que quieres que desaparezca.
En muchos lugares, las hogueras se utilizan también para quemar muñecos que, originariamente, representaban a Judas Iscariote, aunque hoy en día el factor religioso ha dejado paso a la diversión y se suelen hacer muñecos que representan a personajes conocidos del momento.

Una tradición de la noche de San Juan es saltar las hogueras © Michelle Chaplow

Una tradición de la noche de San Juan es saltar las hogueras
La noche de San Juan se celebra el nacimiento de San Juan Bautista, caso peculiar, ya que de los santos se suele celebrar su muerte. Según la Biblia, Zacarías, padre de San Juan, no creía que su mujer estuviera embarazada y cuando ésta dio a luz, encendió hogueras para anunciar a todo el mundo que su hijo había nacido.
Pero los orígenes de esta noche mágica son anteriores al cristianismo y están relacionados con las hogueras que se encendían en esta noche, en la que poderosas fuerzas actúan sobre la Tierra, para ayudar al sol a renovar su energía, ya que a partir de ese momento cada vez los días son más cortos.
En la época del Imperio Romano ya se saltaba tres veces sobre las hogueras y también se atribuían propiedades medicinales a las hierbas recogidas ese día.








1 comentario:

  1. NO OS OVIDEIS DE DE SALTAR TRES VECES EN LA HOGUERA Y TIRAR AL FUEGO TODOS LOS PROBLEMAS QUE TENGAIS ESCRITOS EN UN PAPEL.

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